nació en Santo Domingo Santo de 1870, fue pintor, escultor, fotógrafo y maestro. Según Jeannette Miller, «La obra de Abelardo Rodríguez Urdaneta fue la más significativa a fines del siglo XIX y principios del XX. De temperamento romántico y hechura clásica, Abelardo llena las tres primeras décadas del siglo XX con su fuerte personalidad creativa. Mantuvo una Academia de Dibujo, Pintura y Escultura desde 1908 hasta 1933, año en que murió. Fue además dibujante y músico. Se le considera el precursor de la fotografía artística dominicana. Fue discípulo de Juan Fernández Corredor, no obstante haber recibido sus principales orientaciones del pintor Luis Desangles.
Abelardo es considerado el padre de la escultura dominicana. «Uno de Tantos» fue su obra escultórica más importante y de sus obras pictóricas se destaca «Cabeza de Mujer». En su pintura se aprecia la presencia del clasicismo y el romanticismo.
Obras: Esculturas: Uno de Tantos (1903), Caonabo, Invocación (alto relieve). Fotografía: Retrato de Novia, que le valió el primer premio certamen artístico en el año 1907; Oleos de Duarte, Hostos, Billini, Luperón, entre otros. En 1908 abrió las puertas de su academia de dibujo, pintura y escultura que dirigió hasta su muerte. En 1885 fue premiado por su obra «Perelló» en la exposición organizada por Corredor y Cruz. Abelardo Rodríguez Urdaneta es el artista que ofrece más facetas en el curso de la plástica del siglo XIX y comienzos del XX. Al morir dejó una obra nutrida y variada. Su profusa actividad artística, alcanza una especial distinción.
Como fotógrafo, escultor y maestro, permite al espectador desentrañar la eficacia y el ambiente de su labor pictórica. Está considerado como uno de los más completos precursores de las artes plásticas. Su concepción romántica y su factura clásica, permiten conocer sus sobrias pinceladas, su refinado dibujo y sus variadísimos aspectos del paisaje, matizado de construcciones armónicas y un colorido rico y abundante. Murió en 1933.